Fungicidas

Existe una gran variedad de hongos fitopatógenos que, bajo condiciones climáticas favorables para su desarrollo, son responsables de los ataques de importantes enfermedades, tanto fúngicas como bacterianas, que afectan a la vegetación (hojas, brotes, frutos). Dichos ataques pueden mermar seriamente las cosechas, impactando negativamente en el rendimiento y en la rentabilidad de las explotaciones agrícolas.

Desde un punto de vista práctico, los fungicidas pueden clasificarse en 2 grandes grupos atendiendo a su tipo de movilidad en la planta: fungicidas de contacto (protectores) y fungicidas sistémicos (penetrantes). Asimismo, en función del tipo de actividad, existen fungicidas que ofrecen control preventivo, control curativo y actividad erradicante o antiesporulante. Los mejores resultados se obtienen siempre aplicando los fungicidas dentro de estrategias preventivas, antes de que se inicie la infección, o a lo sumo, aprovechando puntualmente el control curativo (efecto stop) durante la fase de incubación del hongo y antes de la aparición de los primeros síntomas. La Gestión Integrada de Enfermedades implica la puesta en práctica de estrategias que incluyan, prácticas que ayuden a minimizar el riesgo de enfermedades (técnicas culturales, uso de variedades resistentes, etc..) en combinación con el uso racional y sostenible de fungicidas con el mejor perfil posible, que garanticen un control eficaz de las enfermedades y eviten la aparición de resistencias.

Actualmente el catálogo fungicida de FMC en España ofrece soluciones para poder afrontar con garantías la mayoría de problemáticas de enfermedades en una gran variedad de cultivos. En la web de FMC se pueden consultar las fichas descriptivas de los diferentes fungicidas, con las recomendaciones de uso, así como el Catálogo Digital.

Dentro del grupo de los fungicidas preventivos o protectores, FMC dispone de fungicidas a base de cobre (fungicidas cúpricos), solos o en mezcla, como los formulados de la gama Airone® y Sanagricola® que controlan una gran variedad de hongos, así como enfermedades bacterianas, y están autorizados para su uso en Agricultura Ecológica.

En el grupo de los fungicidas sistémicos, FMC cuenta con varios formulados de la familia de los triazoles, como Fungiben® (miclobutanil), Galileo® (tetraconazol), Impact® (flutriafol) Rubric® (epoxiconazol) y Sparta® (tebuconazol), que poseen amplio espectro de actividad sobre enfermedades importantes como el oídio, moteado, royas, y pueden aplicarse en numerosos cultivos (cereales, remolacha, hortícolas, frutales, vid...). FMC cuenta asimismo con fungicidas estrobilurinas como Dedalo® (kresoxim metil) y Azaka® (azoxystrobin), con actividad translaminar y sistemia local. Aportan distinto mecanismo de acción y permiten la integración en estrategias de tratamientos junto con los triazoles para controlar diversas enfermedades y evitar la aparición de resistencias. Finalmente, en el grupo de los fungicidas sistémicos típicos, FMC dispone de la gama Alial®, a base de fosetil-Al, de la gama Capri®, a base de mezclas de kiralaxyl con folpet y mancozeb, y de Galben® M, a base de benalaxil y mancozeb, que resultan eficaces para controlar mildiu en cultivos como vid, patata, hortalizas, frutales…